Deliciosa sopa de cebolla francesa keto

A veces no hay nada mejor que un plato de sopa espeso y calentito. Esta receta de sopa de cebolla francesa baja en carbohidratos comienza con una base de caldo de huesos, cebollas caramelizadas y ajo, y una deliciosa capa de queso para “cerrar el trato“. Esta sopa se puede comer sola o acompañarla con una deliciosa ración de pan de nube, una rebanada de pan de almendras o unas galletas de romero .

Los ingredientes principales de esta sopa de cebolla francesa keto incluyen:

Los beneficios para la salud de esta sopa de cebolla francesa son:

# 1. Fortalece los huesos

Una composición de las cebollas es excelente para nutrir muchos aspectos del cuerpo, pero uno que se destaca es su capacidad para fortalecer los huesos al reducir el riesgo de fracturas.

Algunos estudios han demostrado que aquellas personas que consumen cebollas una vez al día generan una mayor densidad ósea que quienes consumen cebollas una vez al mes o menos ( 1 ).

Se realizó otro estudio en pacientes con osteoporosis. A un grupo se le dio jugo de cebolla y a otro un placebo durante ocho semanas. Aquellos que consumieron jugo de cebolla mostraron mejoras importantes en cuanto a la pérdida ósea y la densidad mineral ósea al restaurar las actividades antioxidantes ( 2 ).

El ajo, un miembro de la familia de la cebolla, también tiene increíbles beneficios para la salud de los huesos. Un estudio realizado en mujeres posmenopáusicas osteoporóticas encontró que el consumo de ajo, durante un período de un año, mostró una gran reducción de las proteínas biomarcadores oxidativos que conducen a enfermedades óseas, como la osteoporosis ( 3 ).

Algunos estudios más, realizados en roedores, mostraron que al consumir ajo se redujo la pérdida ósea al aumentar el estrógeno en las roedores específicamente ( 4 ) ( 5 ) ( 6 ).

Ya sabemos que el caldo de huesos es básicamente oro líquido. Si no lo sabías, bueno, ahora lo sabes y no lo olvides nunca.

Al consumir más caldo de huesos, también obtienes el colágeno y la gelatina que contiene el caldo de huesos. Piensa en el colágeno como el pegamento un pegamento espeso que sostiene y mantiene las cosas en su lugar… eso es lo que hace el consumo de colágeno.

Reconstruye y mantiene las cosas en su lugar, lo que te permite funcionar correctamente sin dolor a partes de tu cuerpo como cartílagos, tendones y articulaciones.

A medida que envejecemos, todo comienza a disminuir, como nuestra producción de colágeno (hola líneas finas y arrugas). El dolor en las articulaciones se convierte en un ex amante que no te dejará en paz. La parte más triste es que todo esto comienza a suceder a la buena edad de 25 años.

Después de los 25, la producción de colágeno cae aproximadamente un 1,5% por año. Ese número no parece mucho; sin embargo, si no encuentras formas de consumir colágeno, es probable que empieces a sentir los efectos secundarios de la deficiencia de colágeno más pronto que tarde.

# 2. Aumenta la inmunidad

En las temporadas de otoño e invierno, es importante fortalecer las defensas de tu cuerpo contra enfermedades como la gripe o el resfriado común. Afortunadamente, esta receta actúa como una deliciosa dosis de medicina.

Se sabe desde hace mucho tiempo que el ajo promueve la salud y la inmunidad. Cuando se tritura un diente de ajo, se libera una enzima llamada alicina, como mecanismo de defensa. Esta enzima natural también proporciona una defensa valiosa para tu cuerpo. Los estudios han demostrado cómo la alicina puede tener un impacto positivo significativo en tu defensa contra los resfriados comunes ( 7 ).

La base de tu sistema inmunológico es tu intestino, lo que significa que debes asegurarte de apoyar tu salud intestinal para maximizar tu inmunidad. El caldo de huesos es uno de los mejores remedios para reparar las paredes intestinales dañadas y proteger tu intestino con el tiempo. También disminuye la inflamación en tu intestino permitiéndote digerir adecuadamente los alimentos y absorber nutrientes beneficiosos ( 8 ).

# 3. Lucha contra el cáncer

Uno de los beneficios más importantes de esta sabrosa sopa es su capacidad para ayudar a tu cuerpo a luchar contra el cáncer.

Las cebollas y el ajo provienen de la misma familia que lucha contra el cáncer de Allium. Un estudio organizado realizado en el sur de Europa mostró que el consumo de cebolla y ajo tenía una correlación favorable con la reducción del riesgo de cáncer ( 9 ).

El ajo contiene específicamente un compuesto llamado N-bencil-N-metil-dodecan-1-amina (BMDA para abreviar). Un estudio pudo extraer este compuesto mediante el método de aminación reductora y se encontró que tiene propiedades anticancerígenas muy prometedoras contra el crecimiento excesivo de las células cancerosas ( 10 ).

Ahora que estás familiarizado con todas las bondades que esta receta de sopa de cebolla francesa cetogénica tiene para ofrecerte, ¡vayamos a la receta para que tu también puedas aprovecharte de estos beneficios!

Deliciosa sopa de cebolla francesa keto

  • Tiempo total: 25 minutos
  • Rendimiento: 4 tazas

Ingredientes

  • 1/2 taza de mantequilla
  • 4 cebollas medianas
  • 3 dientes de ajo
  • 1 cucharadita de tomillo fresco (finamente picado)
  • 4 tazas de caldo de huesos de res
  • 1/4 a 1/2 cucharadita de goma xantana
  • 225 g/8 oz de queso gruyere rallado
  • 1 – 2 hojas de laurel
  • 1 cucharadita de sal
  • 1/4 de cucharada de pimienta negra (opcional *)
  • 1 cucharada de colágeno cetogénico sin sabor

Instrucciones

  1. Derrite la mantequilla en una olla grande a fuego medio-alto. Agrega las cebollas, el ajo, las hojas de laurel, el tomillo, la sal y la pimienta y cocina hasta que las cebollas estén caramelizadas (unos 15 minutos). Desecha la hoja de laurel. Reduce el fuego a medio-bajo. Agrega el caldo de res y 1/4 de cucharadita de goma xantana, lleva la sopa a fuego lento y cocina por 10 minutos. Agrega más goma xantana para obtener una sopa más espesa de lo deseas, agregando solo una pizca cada vez. También puedes agregar colágeno sin sabor en este momento.
  2. Distribuye la sopa en tazones. Antes de servir, espolvorea cada tazón con queso rallado. Ásalo hasta que estén doradas y burbujeantes.
  3. Para una receta de sopa de cebolla francesa más tradicional, usa una rebanada de pan de almendras cetogénicas de 4 ingredientes en la sopa. Tuesta bien el pan, agrégalo a la sopa, luego espolvorea con queso rallado y a asar.

Nutrición

  • Tamaño de la porción: 1 taza
  • Calorías: 543
  • Grasas: 46 g
  • Carbohidratos: 8 g (Carbohidratos netos: 7 g)
  • Fibra: 1 g
  • Proteína: 23 g

Palabras clave: sopa de cebolla francesa

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