En siglos pasados, las personas usaban todas las partes de los animales que cazaban. Por ejemplo, freían la piel de cerdo para extraer la grasa y usarla en otros platos. Los subproductos de esta fritura del a piel son unos chips crujientes y aireados llamados chicharrones o cortezas. Afortunadamente para los que comen keto, las cortezas de cerdo son un snack lleno de proteínas y sin carbohidratos.
Hay algunas maneras de incorporar las cortezas de cerdo en tus comidas. Espolvorea con ellas las palomitas de maiz o mójalas en salsa Ranchera. Las cortezas de cerdo trituradas son un excelente sustituto de las migas de pan, así que pruébalas en recetas keto como las albóndigas, el pastel de carne y el pollo frito.