Las semillas de granada son un sabroso aperitivo y una buena fuente de antioxidantes. Las semillas de granada fresca contienen alrededor de 3 g de carbohidratos netos por porción de 30 g. Ten en cuenta que este tamaño de porción es bastante pequeño, así que ten cuidado de no darte un atracón.
Las semillas de granada son una buena fuente de ácido púnico, un ácido graso poliinsaturado. Los ácidos grasos poliinsaturados, a veces abreviados como “PUFA”, son una de las grasas saludables que los expertos recomiendan que se consuman en las dietas keto. Las primeras investigaciones realizadas sobre roedores sugieren que el ácido púnico puede ayudar a prevenir la obesidad y el cáncer, aunque tendremos que esperar hasta que los científicos completen sus estudios en humanos antes de decidir tomar en exceso este ácido PUFA.
Si compra semillas de granada secas y envasadas, verifica detenidamente los datos nutricionales. Los fabricantes a menudo agregan azúcar para mantenerlas dulces, por lo que las semillas de granada secas tienden a tener un conteo astronómico de carbohidratos.
Para un aperitivo de semillas más compatible con una dieta keto, prueba a comer semillas de girasol o pipas.